Ubicada en el corazón de Italia, la región de la Toscana es un tesoro que combina naturaleza, historia y cultura. Sus paisajes, legado artístico y famosos viñedos la convierten en un destino verdaderamente inolvidable, y en mi región favorita de Italia. Los cipreses que se alinean en las colinas y los campos dorados que se extienden bajo el cálido sol italiano crean un escenario que parece sacado de un cuadro.
En la Toscana se encuentran algunas de las ciudades más icónicas de Italia. En esta entrada te propongo una ruta por algunas de ellas, sin contar Florencia (si quieres saber más sobre Florencia te invito a leer el post 24h en Florencia :)) . ¡Empecemos!
1. Lucca
Empezamos nuestra ruta por Lucca. Esta pequeña ciudad pasa muchas veces desapercibida por aquellos que visitan la Toscana, sin embargo, es un rincón lleno de encanto, cultura y arquitectura impresionante que ha perdurado a lo largo de los siglos. La mejor forma de visitar Lucca es en bici. Al llegar a la ciudad podrás alquilarlas en uno de los muchos locales ubicados en el centro que ofrecen este servicio. El coste es aproximadamente de 4€/h (el precio suele disminuir por cada hora que añades).
El rasgo más distintivo de Lucca es su impresionante muralla renacentista que rodea todo el casco antiguo de la ciudad. Construida en el siglo XVI, esta muralla ha sido cuidadosamente preservada y ahora sirve como un camino panorámico. Pasear en bici o caminar por lo alto de las murallas ofrece una vista única de la ciudad y sus alrededores.
El centro histórico de Lucca es un laberinto de calles adoquinadas, plazas encantadoras y edificios de colores cálidos. La Catedral de San Martín es uno de los lugares más destacados, con su impresionante fachada y una mezcla de estilos arquitectónicos que reflejan siglos de evolución. De hecho, esta iglesia nos recordó a la arquitectura de la Piazza dei Miracoli en Pisa. También encontraréis la famosa Torre Guinigi, que se distingue por sus robles en la parte superior. Además, Lucca es el lugar de nacimiento de Giacomo Puccini. Los amantes de la música pueden visitar la Casa Museo Puccini, donde se exhiben objetos personales, partituras y recuerdos del compositor.
Sin duda, mi lugar favorito de Lucca es la Plaza del Anfiteatro. Esta encantadora plaza circular, que alguna vez albergó un antiguo anfiteatro romano, ha sido transformada en un vibrante centro urbano con restaurantes y tiendas locales. Sus edificios de colores pastel se alinean en círculo, creando un espacio acogedor para los visitantes. Si buscas donde parar a descansar y comer algo en Lucca, este es el lugar idóneo. Además es común encontrar músicos callejeros que alegran el ambiente de la emblemática plaza. Durante nuestra visita vimos a niños y parejas bailando en el centro.
Dónde aparcar en Lucca
Si viajas en coche, podrás aparcar en las zonas azules que hay en alrededores de la muralla (nosotros aparcamos cerca de Porta Sant'Anna). Esta zona no queda muy lejos del centro y sale a 1,50€/h.
2. Pisa
La ciudad de Pisa es conocida mundialmente por su famosa torre inclinada ubicada en la Piazza dei Miracoli. Sin embargo, Pisa tiene mucho más que ofrecer a sus visitantes. ¡Te lo explico todo a continuación!
Empieza tu recorrido por la Piazza dei Miracoli, donde se encuentra uno de los complejos monumentales más famosos del mundo. Es sin duda la zona más emblemática de Pisa y la que atrae más turismo, por ello te recomiendo que visites la piazza pronto por la mañana y dediques el resto del día a visitar otras zonas de la ciudad. Puedes consultar en esta página los precios y horarios para acceder a los distintos monumentos: https://www.opapisa.it/en/tickets/prices/ Si tienes claro que quieres acceder a alguno de ellos, te recomiendo que compres los tickets con antelación (especialmente para subir a la torre inclinada).
El baptisterio de Pisa es el baptisterio más grande de toda Italia. Su construcción se inició en 1153 por el arquitecto Diotisalvi. Su parte inferiror es una clara muestra del estilo románico pisano, sin embargo, la primera planta es puramente gótica. En su interior, se encuentra una hermosa pila bautismal octogonal, obra de un artista procedente de Como: Guido Bigarelli.
La Catedral de Santa Maria Assunta empezó a construirse en 1064, bajo la dirección de Buscheto a quien sucedería Rainaldo. El edificio es de grandes dimensiones: 100 m de longitud, cinco naves y un ábside de gran profundidad.
El campo santo o cementerio de Pisa, se considera tierra sagrada. Esto se debe a que los cruzados trajeron arena del Calvario, en Jerusalén.
La torre inclinada de Pisa es sin duda alguna la atracción principal de la ciudad. Fue construida durante dos siglos XII-XIV y es, en realidad, el campanario de la Catedral de Santa Maria Assunta. Tiene 58 m de altura y destaca por el mármol blanco y su purísimo estilo románico.
Tras la visita a la emblemática Piazza dei Miracoli, te recomiendo que te continúes explorando la ciudad, ¡Pisa tiene mucho que enseñarte! A menudo esta pequeña ciudad toscana se reduce al maravilloso conjunto monumental (que no es poco :)), sin embargo Pisa tiene mucho encanto y seguro que te sorprenderá. En nuestro viaje por Italia, destinamos pocas horas a Pisa pensando únicamente en la Piazza dei Miracoli, ¡error! Después de callejear un rato, nos quedamos con ganas de más...
Al adentrarte en el casco antiguo de Pisa descubrirás un laberinto de calles estrechas y empedradas que albergan una gran variedad de tiendas, restaurantes (con una pinta increíble) cafeterías acogedoras y edificios históricos. Destaca la Piazza del Cavalieri, donde se encuentran el Palacio del Cavalieri, la Iglesia de Santo Stefano y el Palazzo della Gherardesca.
Una de las calles más emblemáticas es Borgo Stretto, que conduce a la Piazza Garibaldi. Esta plaza está ubicada en el lado norte del puente más famoso de Pisa: el Ponte di Mezzo. Destaca por el Casino dei Nobile y la estatua en el centro, que representa a Giuseppe Garibaldi. Desde aquí podrás disfrutar de unas vistas increíbles de Pisa reflejada en el río Arno.
Entre los edificios que se reflejan en el Arno se encuentra el Palazzo Blu. Este palacio renacentista acoge el Museo de Arte Antiguo. Si continúas paseando a orillas del río llegarás hasta la iglesia de Santa Maria della Spina. Se trata de una joya de la arquitectura gótica, construida entre 1223 y 1230 para albergar una espina que procedía de la corona de Cristo, llevada a Pisa por un cruzado.
Dónde aparcar en Pisa
Durante nuestra visita a Pisa aparcamos el coche en el parking ubicado en la calle Via Cammeo Carlo Salomone. El precio es de 5€/h.
3. San Gimignano
Situado en las colinas de la Toscana este pueblo medieval se conoce como el "Manhattan de la Edad Media" y "La ciudad de las mil torres".
Los orígenes de San Gimignano se remontan al siglo XII, cuando tuvo un gran auge por encontrarse en el camino hacia Roma. Durante la época medieval, las familias adineradas competían entre sí para ver quién construía la torre más alta, como símbolo de poder y riqueza. Sin embargo, de las 72 torres originales ahora sólo quedan 14.
En nuestro viaje a la Toscana nos dirigimos a San Gimignano después de visitar Pisa, por la carretera SP11 que cruza por los campos y viñedos típicos de la región. Durante el trayecto (1h 20min) pudimos disfrutar de unos paisajes preciosos y adentrarnos en la serenidad y belleza de la Toscana. Os recomiendo seguir esta ruta si tenéis pensado realizar el trayecto Pisa-San Gimignano en coche.
Dónde aparcar en San Gimignano
Pese a ser pequeño, San Gimignano es un destino MUY turístico. Esto hace que los accesos al pueblo y al aparcamiento se colapsen fácilmente. Hay algunas zonas de aparcamiento gratuito en la calle pero es verdaderamente difícil encontrar alguna libre. La localidad cuenta con 5 parkings de pago; sin embargo, es habitual que en temporada alta se formen colas para acceder a ellos. Nosotros conseguimos aparcar en el parking 4 después de unos minutos de cola.
Si buscas información más detallada de los lugares de aparcamiento gratuito y parkings en San Gimignano te recomiendo leer esta entrada de la página Llévame a Italia.
Lo mejor que hacer en San Gimignano es pasear por sus calles medievales de piedra, llenas de comercios artesanales, locales gastronómicos y... ¡museos de la tortura! Las calles más emblemáticas son Via San Mateo (que conecta con una de las puertas de la ciudad: Porta San Mateo) y Via Diacceto. Además, entre los lugares que visitar están la Piazza del Duomo y la Piazza della Sisterna. Estas son las dos plazas centrales de San Gimignano, donde se concentran la mayoría de las 13 torres.
En el centro de la plaza de la cisterna se encuentra un pozo de agua octogonal que antiguamente abastecía a toda la ciudad. Esta plaza triangular está unida por un paso a la Piazza del Duomo, escenario de fiestas, torneos y mercados durante el s.XII. Desde su centro se pueden observar impresionantes palacios como el Palazzo Razzi, la Casa Silvestrini, el Palazzo Tortoli, el Palazzo dei Cortesi y el Pellari, además de torres medievales como las torri degli Ardinghelli, la de los Becci, la de Cugnanesi y la del Diavolo. Además, en la plaza del Duomo se encuentra la Colegiata de Santa Maria Assunta (iglesia románica del s.XII), y el Palazzo Comunale, antiguo ayuntamiento de 1288 que ahora alberga el Museo Cívico.
En el Museo Cívico se encuentra el acceso para subir a la torre más alta de San Gimignano y la única abierta al público: Torre Grossa. La entrada general cuesta 5€ (3€ para los niños) y está abierta hasta las 19:30h.
Por último, no puedes irte de San Gimignano sin probar un gelatto de la famosa Gelateria Dondori. Situada en la Piazza della Sisterna, esta famosa heladería aparece en las guías internacionales más importantes y ha recibido numerosos premios. Cuentan con sabores tradicionales pero son famosos por sus especiales, os puedo asegurar que encontraréis sabores únicos. Además, durante nuestra visita el maestro heladero Sergio se encontraba en el local, saludó a todos los clientes de forma amistosa y pudimos entablar una breve conversación con él.
5. Siena
En nuestra última parada en la Toscana, nos dirigimos a Siena. Siena es una ciudad gótica edificada sobre tres colinas en el corazón de la alta meseta Toscana. Se trata de una ciudad monumental plenamente Medieval, rodeada de murallas y con su centro en la Piazza del Campo. Nada más llegar nos sorprendimos por la tranquilidad de esta ciudad, pese a ser pleno mes de agosto no nos tuvimos la sensación de estar rodeados de turistas. Otro de los aspectos que más sorprenden de Siena es su gran desnivel. La ciudad está repleta de subidas y bajadas, calles empinadas y alguna que otra escalera.
A nivel histórico, en la Edad Media, Siena fue un importante centro comercial y textil de la época, lo que favoreció la aparición de una importante escuela gótica de pintura y un auge de la arquitectura. Esta prosperidad se vió frenada en 1348 por la peste negra, desde entonces, el dominio de la Toscana pasó a manos de Florencia.
Dónde aparcar en Siena
La muralla medieval delimita el el casco antiguo, esta zona es prácticamente peatonal o de acceso para residentes y comerciantes. Sin embargo, nosotros encontramos una calle con plazas de aparcamiento gratuito cerca de la muralla y a unos minutos a pié del centro histórico. Esta es la dirección: Via Pian D'Ovile, 53100 Siena.
Empezamos la visita por la elegante Piazza Salimbeni, situada en pleno casco antiguo y rodeada de varios edificios históricos. Entre los edificios que la rodean, el Palazzo Salimbeni es el más importante y en el que se encuentra la oficina central de la Banca Monte dei Paschi di Siena, un banco con más de 500 años de historia. Los otros dos edificios de esta plaza rectangular son el Palazzo Tantucci y el Palazzo Spannocchi.
Continuamos por la Via Banchi di Sopra, una de las calles principales del centro histórico de Siena que termina en la fascinante Piazza del Campo. A lo largo de esta calle se encuentran diversos palazzos medievales y comercios típicos.
Al adentrarte a través de una de las callejuelas que conducen a la Piazza del Campo, descubres una plaza enorme, que sorprende por su inclinación. Esta ha sido el centro de la vida pública de Siena desde que fue construida sobre un antiguo foro romano, en el año 1100. La plaza es el lugar de encuentro para los 17 contrade (barrios) de Siena. En ella, destacan varias construcciones monumentales:
El palacio del gobierno o Palazzo Pubblico, con su elegante torre, se añadió en 1297. Todavía sede del ayuntamiento, sus ventanas góticas y sus magníficas torres medievales, asentaron los cánones de la arquitectura sienesa.
La Torre Mangia, que forma parte del Palazzo Pubblico. Con sus 102m, es una de las torres medievales más altas de Italia. Su acceso está abierto al público y puedes subir a disfrutar de las vistas pagando entrada, sin embargo, más adelante te recomiendo el mejor mirador de Siena.
Fonte Gaia, una fuente renacentista construida a petición de las autoridades con motivo de la festividad de la llegada, por primera vez, del suministro de agua a Siena. Su traducción al español es "Fuente de la Alegría", nombre que simboliza la alegría de los sieneses al conseguir suministrar agua a la ciudad.
Palazzo Piccolomini, en la esquina noroeste de la plaza. Las obras se iniciaron en 1469, según el deseo de Giacomo y Andrea Piccolomini Todeschini, sobrinos del Papa Pio II. Desde el año 1858 alberga el Museo dell´Archivio di Statu di Siena en el que se conservan documentos y obras de arte.
Continuamos por otra de las plazas más importantes de la ciudad y de todo Italia, la Piazza del Duomo de Siena. La catedral reúne esculturas de estilo gótico tardío, pinturas del Renacimiento temprano y ejemplos de diseño barroco. Aunque los primeros arquitectos decoraron el edificio al estilo románico, desde el punto de vista formal se trata de uno de los meiores ejemplos de gótico puro. Construida entre 1215 y 1263, es considerada una de las iglesias más bonitas del mundo.
Igualmente de fascinantes son los edificios que rodean al Duomo: el Museo Metropolitano y el Hospital de Santa Maria della Scala, con frescos de la década de 1440 que recrean escenas hospitalarias de la Edad Media. El Baptisterio de San Juan, construido en estilo gótico en el 1390, es otra de las joyas que se encuentran en la Piazza del Duomo.
El mirador del Panorama de Facciatone, situado al lado de la catedral, tiene las mejores vistas del centro histórico. Este mirador, es en realidad una parte de la fachada de la que iba ser la nueva catedral de Siena y que por una epidemia de peste no se pudo terminar. Para disfrutar de las vistas hay que entrar por el Museo de la Ópera y subir más de 200 escalones.
Puedes optar por visitar únicamente la Catedral por 7€, o adquirir el pase completo de la Piazza del Duomo. Este pase cuesta 15€ e incluye todos los monumentos de la piazza (también el mirador del Panorama). Ambos tickets pueden comprarse online o en taquillas, nosotros optamos por la segunda opción y no encontramos demasiada cola. Sin embargo, los monumentos del complejo cierran MUY pronto (sobre las 17h), incluso en verano. Te recomiendo ir con tiempo, sobre todo si quieres acceder al mirador.
Continuamos la ruta en la gigantesca Basílica de Santo Domingo. Esta iglesia gótica construida en el siglo XIII, fue el escenario de los éxtasis de Santa Catalina. En el interior, destacan los frescos que narran la vida de la santa y un tabernáculo renacentista de mármol que conserva la cabeza y un pulgar de la Santa Catalina. El acceso a la basílica es gratuito y desde el exterior podrás disfrutar de unas buenas vistas de todo Siena.
Por último, nos dirigimos a el Santuario y Casa de Santa Catalina de Siena. Se trata de la casa natal de Santa Catalina, patrona de Italia. Tiene su entrada por la via Santa Caterina y está construida por un conjunto de oratorios superpuestos. En la planta inferior se distingue la celda en la que vivió la santa y, en la superior, se venera la Crucifixión ante la que quedó estigmatizada.
ALGUNAS RECOMENDACIONES...
Nosotros hicimos esta ruta en 1 día. El tiempo es justo, nos quedamos con ganas de pasar más rato en cada uno de los lugares. Si lo que buscas es un primer contacto con la Toscana, adelante. Si quieres visitarlo con calma, probar restaurantes locales, entrar a los monumentos, tiendas, etc. te recomiendo dedicarle más días y hacer las visitas con calma.
El acceso a San Gimignano y sus parkings se colapsa fácilmente, sobre todo si viajas en verano. Te recomiendo llegar a San Gimignano a primera hora para evitar colas y, con muchísima suerte (es prácticamente imposible) conseguir aparcar de forma gratuita en las zonas blancas.
Recuerda que para acceder a muchos de los Duomo y Basílicas es necesario cubrirse los hombros y, en algunos casos, las rodillas. Si viajas en verano te recomiendo llevar algún jersey fino o pañuelo en el bolso/mochila.
¡Pisa es mucho más que su torre inclinada! Dedícale tiempo a descubrir su casco antiguo y pasear a orillas del Arno.
Vale la pena recorrer la Toscana en coche, con las ventanillas bajadas y una buena playlist. El paisaje es increíble y, si tienes tiempo, puedes parar a visitar algún viñedo o incluso reservar alguna experiencia de cata de vinos toscanos.
¡No te olvides de Lucca! Esta pequeña ciudad de la Toscana suele pasar desapercibida pero es toda una joya. Además, te recomiendo visitarla dando un agradable paseo en bicicleta.
En nuestra ruta, paramos a hacer un picnic en Parco il Vallone, ubicado entre San Gimignano y Siena. Es un lugar verde, muy tranquilo y con aparcamiento gratuito. Además no es necesario desviarse de la ruta para la parada.
Comments